Harta ...

A ver que sale capaz que no sale nada, o si como sucede casi siempre.

Harta del "largor" de las horas que experimentaba Virginia Woolf escribiendo la señora Dalloway cuando ella quería que le entendiesen que necesitaba "mínimo", ir a comprar jengibre a Londres...

Una angustia de ayer haber ido a ver la película "que vieron un millón de espectadores". Sí, "la argentina", y darme cuenta que me puse más autoreferencial que jamás con el personaje de ella, donde todo era queja, donde nada era paz y amor, por supuesto hasta que encontró su sano equilibrio. Pero claro, yo... estoy en el nudo y no en el desenlance. Eso pasa ahora con las ficciones. Sí, claramente pasa eso.

Harta del "qué hago aquí" como si ningún "aquí" fuese el que necesito.

Harta de mirar desde la vereda de enfrente a todos como si el mundo estuviese de fiesta y simplemente a Rochitas no la hubiesen invitado. Ella que solía dar tan buenos consejos.

Y ni hablar de como pienso y repienso en "quien era yo" laralala como cantaría Lerner, lástima que por ahora "o las cosas no han vuelto a estar en su lugar" o ya no me satisface el lugar que tenían esas cosas.

Y la requetapa' G, si a los tresssssssssss. Al 1 porque como la mayoría que leyó este espacio sabe, le dediqué no solo mi calidad de lover comprensiva y paciente sin siquiera plan a la vista "two years ago", y cuando te tenía casi enterrado volviste a aparecer y el proyecto de "at the manager world" sonaba tan lindo y era desafío, y encima lo que hacían con su música me hacía vibrar el alma ... pero ahí te conocí no sólo como tal, sino como amigo, como hijo, como artista, me encantó que le regalases tu café helado a un perro, me fascinó como te dirigías a un chico de la calle, como tratabas a los mozos, como disfrutabas de tus amigos, como no nos teníamos que explicar nada de nada . Como empezaste a sentir más aire ... y van ...

Pero claro. No me di cuenta. No me di cuenta a tiempo que estaba hasta las manossssss(¿vos también? eso creí escuchar desde Mar del Plata, la última vez). Y vos si que sos de los que viven como si fuesen eternos. Ahora me gustaría que me des unas clases esas del "no apuro". "Porque todo lo que vendrá no puede ser igual a lo que va a venir" canta el otro que alguna lejana vez fue tan amigo también.

Pero en la lista de odios, no la encabezas vos G la encabezas vos C, y te llevas todos los premios. Y yo lo premios de Penélope y de San Blas. Y se acuerdan cuando aquí dije "Si. Necesitas de esa energía blanca que cuando vos te vas a mi me falta". Por eso el exorcismo duró dieciséis días y tal vez por eso a cinco meses de eso aún lo sigo padeciendo, hoy. Hoy que me acuerdo que el primer ahogo en mi habitat lo sentí con vos ahí.

Hoy que recuerdo que jamás había habido mayor cambio de palabras en esas paredes que las que puede tener cualquiera con cualquier par. Eso.

Pero pinté, cambié los muebles de lugar -ya los quiero volver a dar vuelta- regalé lo que consideré ya no tenía cabida, lo tuyo te lo devolví. Y sin embargo. Y sin embargo no volví a sentirme bien en mi espacio.

¿Es duro lo que cuento?, avisenme.

Si se trata de un cambio de piel, de un período de trasnmutación que pase pronto por Dios. Porque sí, el finde hubo sol. Estuve con ... cinco soles, cinco almitas pares.

No me dejaron ni cuando hubo sol ni cuando empezó la sombra. Pero ¿dónde está la Rochitas que se ordenaba sola, que no se atormentaba, qué no se anticipaba a los miedos, qué nada lo vivía como algo irremable?

¿Aquella que disfrutaba comprando regalos, oliendo lavanda, sacando fotos, reuniendo amigos y no tanto, si alguien me la encuentra me la manda para acá?

Nota a mi "no medio hermana": Fabiana, yo ya si pude tomar un tren ... seguramente en estos días se lo contaré a tu mamá. Sí, la que me quiere, la que considera que esta primavera traerá luz en el alma, y brotes en el corazón.