Días de despertador a las 07:30 (para cumplir con el clásico ritual de no poder abandonar the bed hasta las 8), la juguera enchufada pronta para estrujar mix de zanahorias, tomates y pepinos (si ya sé que es raro ; ) pero desde hace ya meses se trata de mi best combinación). Mientras ... controlo que el agua para los mates amargos -únicos artifices de que 8:40 me atreva a salir "al mundo" y colgarme de un 110 bondibus- para una vez más (y ya van 4 meses) ahorrame los 8 pesiños que pretenden obtener los "gentiles señores de techito amarillo" cada vez, que LA MAYORIA DE LAS VECES, aún más "later" nos depositan en el lugar de destino.
Todo se vuelve un felicitarme cada vez que lo logro, y dudar, y pensar que capaz puedo empezar a "no" y caer nuevamente en mis viejos y arraigados vicios.
Un tappercito high five (ya que si de tapper se trata, que por lo menos marque cierto estilo) con una vegetarian y elaborada meal lista desde la noche anterior, me convierten en lo que nunca fui, pero hoy por hoy lo considero un super mérito logrado.
Desde que empecé a trabajar a los 18 años, paralelo a que también empecé a estudiar, los taxis fueron mi perdición, la causa de mis ruinas monetarias, la causa también de JAMAS, pero cuando digo JAMAS es JAMAS de verdad, tener un mísero ahorro. También vale decir, los responsables de que no perdiese el premio por presentismo y que haya llegado a tantos lados de mejor humor. Un modo de compensar el esfuerzo diario, aunque realmente se trate de un simple canje de esfuerzos para la sola supervivencia (pago mi alimento mi techo mi ropa, y yastà! y de vacaciones, con el clásico pago de sueldo adelantado) uy! pero que bajón maaaal, y eso que a veces hasta esto es mucho, aunque no deje de ser la triste realidad.
Otra perdición han sido los almuerzos, desayunos de media mañana y los delivery food nocturnos.
Muchas veces por pudor no confesaba mis diarios almuerzos en restorancitos "nada mal" en la zona respectiva (tratese de la facu, o el job de turno) para que cada día culmine con un llegar a casa y premiar el hecho de salir ilesa del ajetreado día con un pronto delivery...
Y si, de eso se ha tratado, de premiarme! de premiarme con taxis, con comidas hechas con una cozy and beauty life (I'm libraaaaa). Esto ha incluído jamás absolutamente hacerme las manos yo, o pensar en evitar la colorista, o la depiladora o todas esas colaboradoras para que nuestro "andar presentable" sea un hecho...
Y bueno! de vicios se trata, o se trataba (I hope!) porque me siento más ágil, más práctica y hasta más "viva" cuando mi bienestar y buen humor parecen no depender más de estos menesteres...
10 de mayo de 2007
Publicado por Rochies en 10.5.07
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2 comentarios:
A mi me pasa igual, pero con los remises!!!
Y cuando me premio por algo, después me siento culpable, porque generalmente, el premio implica saber que ese mes, me va a costar llegar al final!
Besos y gracias por pasar!
ES LA TRISTE REALIDAD FLOPY!
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