La invadió la nada. La dificultad de ser. Como nunca antes. Como jamás hasta ahora.
¿Qué hacer? ¿Hacia dónde ir? Las metas prefijadas han ya desaparecido. Carecer de rumbo; abismos.
El rumor permanente. El desvelo. La sinrazón.
Se trata de una búsqueda, la más compleja. Se trata de avanzar sin miedos hacia alguna parte. Se trata de perdonarse y perdonar. De volver a elegir.
Y el sinrumbo todo lo inunda. Asfixian las horas; la suma de horas vacías que se completan de pensamientos vanos. Vaivén.
Agobia el dolor de los pasados ya vencidos en un presente continuo.
Suma de dolores, vanos. Enteros. Que arremeten sigilosos. Pendientes, que impiden ser.
4 comentarios:
Es en esos momentos en que sentimos que la tierra se abre bajo nuestros pies. Muy bien expresadas tus letras.
Un abrazo...y me alegra tenerte otra vez en el mundo bloguero (al menos hacía mucho que yo no te veía)
Ro es un precioso escrito que da comienzo a una cadena de escritos e historias que están por venir
Besotes
Luciana
Me gusto, a pesar del tema, lamentablemente vivido en forma directa, debo felicitarte por que esta bien escrito, sentimientos fuertes como esculpidos en una tabla de piedra, al leerlo parece de estar dentro de ese vaiven con una dinamicidad de la escena que se percibe, en contraste a tu estado de aparente inactividad y falta de iniciativa.
No olvides nunca que todo el camino recorrido es una transición y los momentos difíciles son la antesala de otros mejores.
A veces nuestra brújula se vuelve loca y no encuentra el norte, pero el norte siempre está ahí. Si lo sigues buscando lo encontrarás. Se que lo sabes.
Publicar un comentario